Este dulce que aprendemos hoy es típico del país vasco, más concretamente de Bilbao. Y es mi buenísima amiga y compañera zallatarra, Eguzkiñe, quien me ha facilitado esta receta. Recuerdan mucho los Pastéis de Belém que nuestros vecinos portugueses elaboran, dicen, con una receta llena de misterio que sólo unos cuantos conocen y que se va heredando bajo el más estricto de los secretos...
Lo ideal es utilizar hojaldre para la base pero, a falta de ello, usaremos unas obleas con las que conseguiremos un resultado igualmente delicioso.
Su nombre parece ser que proviene del tipo de harina con que se elaboraban, harina de arroz, traída por los marinos vascos desde Filipinas aunque también se cuenta que se usaban los restos de arroz con leche para hacer una crema que servía de relleno. En cualquier caso es una receta sencilla y con un resultado espectacular.
La sofisticación llega en forma de "Carolina" que sería otro dulce estrella de la repostería bilbaína cuya base son estos pastelitos cubiertos por un cono elaborado con merengue y bañado con chocolate y yema de huevo.
Ingredientes (con estas cantidades nos saldrán 16 pastelitos, justamente la cantidad de obleas que vienen en el paquete):
200 ml. de leche
200 ml. de nata
50 g. de harina de arroz
100 g. de azúcar
70 g. de mantequilla
2 huevos
1 paquete de obleas (o plancha de hojaldre)
Cuando hago un postre que lleva leche, me gusta primeramente darle el pequeño toque con canela en rama y cáscara de limón o naranja. Así que, en este caso, no vamos a ser menos y hervimos la leche, un poco antes para que esté fría, con estos ingredientes para que coja sabor.
A continuación derretimos la mantequilla y vamos incorporando el resto de ingredientes para seguidamente pasarlos por la batidora hasta que no haya grumos.
Cubrimos un molde especial para tartaletas con las obleas y las llenamos con la masa obtenida anteriormente.
Hornear a 170 grados durante media hora aproximadamente.
Añadir un pequeño detalle, si no imprescindible, sí recomendable: cuando lo vayáis a comer templadlo unos segundos en el microondas; 10- 15 serán suficientes. El resultado espectacular...
Añadir un pequeño detalle, si no imprescindible, sí recomendable: cuando lo vayáis a comer templadlo unos segundos en el microondas; 10- 15 serán suficientes. El resultado espectacular...